La tripulacion conformada por Pachi Rivero, Toño Piris y Peter B. Becker emplean 12 días, 15 horas, 23 minutos y 50 segundos, lo que supone una velocidad media de 12,11 nudos.
A las 11 horas, 59 minutos y 35 segundos, hora española, el W Hotels cruzaba la línea que determina el final del recorrido del récord Nueva York - Barcelona, cubriendo de este modo las 3.670 millas de la ortodrómica (el recorrido más corto).
Sol y buena brisa marina han sido las condiciones de la brillante arribada del W Hotels a siete nudos de velocidad; condiciones que han permitido al IMOCA Open 60 cruzar la línea con espí asimétrico y un viento de 10-11 nudos, todo un contraste con las que hubo nueve horas antes con el Estrella Damm, que llegó en plena noche con niebla cerrada y un viento de apenas tres nudos.
El W Hotels completa de este modo una brillante travesía en la que tan sólo en el último tramo del Atlántico se quedaron ligeramente atrasados respecto al Estrella Damm, a causa de una serie de incidentes entre los que una avería en uno de los timones ha sido el más significativo. Estos incidentes han sido la probable causa de buena parte de las 9 horas, 22 minutos y 32 segundos que les ha sacado el Estrella Damm, una diferencia poco importante después de 3.650 millas y que demuestra el alto nivel a que se ha navegado entre el Nueva York y Barcelona.
Sol y buena brisa marina han sido las condiciones de la brillante arribada del W Hotels a siete nudos de velocidad; condiciones que han permitido al IMOCA Open 60 cruzar la línea con espí asimétrico y un viento de 10-11 nudos, todo un contraste con las que hubo nueve horas antes con el Estrella Damm, que llegó en plena noche con niebla cerrada y un viento de apenas tres nudos.
El W Hotels completa de este modo una brillante travesía en la que tan sólo en el último tramo del Atlántico se quedaron ligeramente atrasados respecto al Estrella Damm, a causa de una serie de incidentes entre los que una avería en uno de los timones ha sido el más significativo. Estos incidentes han sido la probable causa de buena parte de las 9 horas, 22 minutos y 32 segundos que les ha sacado el Estrella Damm, una diferencia poco importante después de 3.650 millas y que demuestra el alto nivel a que se ha navegado entre el Nueva York y Barcelona.
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